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  • Última actualización 2024-03-27 23:33:12
La Cancillería dijo estar comprometida con Música en las fronteras a través de la fundación Batuta.
Arauca

Batuta suspendió sus actividades en Arauca por falta de recursos. Esperan volver a funcionar en un mes

La Fundación Batuta, que funciona en la Institución Educativa Francisco José de Caldas, del municipio de Arauca, tuvo que suspender sus actividades por falta de recursos de la Cancillería de Colombia, entidad encargada de la Fundación a nivel de frontera.

Al parecer, la Cancillería ahora concentra sus recursos en la situación de los migrantes venezolanos, por lo que la Fundación en Arauca y demás zonas fronterizas, quedó por fuera de las prioridades de la Cancillería, perjudicando así a 144 niños en condiciones de vulnerabilidad y desplazamiento, que se beneficiaban con las clases de música.

"Ya le enviamos una carta al gobernador Ricardo Alvarado Bestene, para solicitar ayuda económica que vuelva a reactivar el programa social de la fundación con los niños araucanos, y respondió que, aunque la Gobernación podría ayudar, el proceso para tal fin se demoraba al menos un mes. Esperamos que se puedan dar las cosas, porque esto ayuda mucho a los niños en su crecimiento y desarrollo", comentó Ruswel Yasno, coordinador de la Fundación Batuta en Arauca.

Por su parte, el director para el Desarrollo y la Integración Fronteriza, Víctor Bautista, explicó que están haciendo las gestiones para buscar los recursos para programas sociales de alto impacto como el desarrollado por estos centros.

“Nuestro plan y nuestra dirección tienen dentro de sus principales retos mantener estos proyectos sociales de gran impacto”, dijo.

Aseguró que la próxima semana tendrán la revisión del tema con el Ministerio de Hacienda. Durante estos cinco años de manera ininterrumpida la entidad nacional ha dado los recursos para el programa.

Los beneficiados por el programa están preocupados por el destino del proyecto que les ha permitido a los niños pobres de las zonas de frontera formarse musicalmente y tener el instrumento entre sus manos.

Los padres de los acudientes han sido llamados a reuniones para explicarle la situación. Muchos aseguran que el proyecto ha sido salvador de la vida de muchos niños que no han caído en vicios por estar tocando un instrumento.

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