• Colombia
  • Última actualización 04:04 PM
Colombia da inicio al primer ciclo nacional de vacunación contra fiebre aftosa, brucelosis bovina y rabia silvestre
Arauca

ICA inicio al primer ciclo nacional de vacunación contra fiebre aftosa, brucelosis bovina y rabia silvestre

Con el objetivo de proteger la sanidad animal, garantizar alimentos seguros y mantener el estatus sanitario del país, el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) dio inicio hoy al primer ciclo nacional de vacunación contra la fiebre aftosa, la brucelosis bovina y la rabia de origen silvestre.

La campaña, que se desarrollará hasta el próximo 21 de junio en cumplimiento de la Resolución 04038 del 15 de abril de 2025, es de carácter obligatorio para todos los ganaderos del país. Se espera inmunizar aproximadamente 30 millones de bovinos y bufalinos en este periodo.

“El cumplimiento de este ciclo no solo protege a los animales, sino que también preserva la seguridad alimentaria del país y fortalece el comercio ganadero a nivel nacional e internacional”, destacó el ICA en su boletín oficial.

La ejecución del proceso está a cargo de FEDEGÁN (Federación Colombiana de Ganaderos) y las Organizaciones Ejecutoras Ganaderas Autorizadas (OEGA), quienes serán los responsables de garantizar que las vacunas se apliquen de acuerdo con los estándares técnicos exigidos por el ICA. Solo podrán utilizarse vacunas evaluadas y aprobadas por la entidad, que cumplan con criterios de esterilidad, pureza e inocuidad.

En las zonas identificadas como de riesgo para rabia silvestre, todos los animales deberán ser vacunados sin excepción, conforme al artículo 7 de la resolución vigente.

Para facilitar el acceso a la jornada, FEDEGÁN estará enviando la programación oficial a través de mensajes de WhatsApp desde el número 3234069290 o mediante llamadas telefónicas desde el 6019194900, canales oficiales que ya han sido verificados por el gremio.

Las autoridades invitan a todos los ganaderos a cumplir con esta obligación dentro del plazo establecido. No hacerlo puede poner en riesgo la salud animal, la reputación del país como productor ganadero y los mercados internacionales que dependen del cumplimiento sanitario riguroso.

Compartir esta publicación