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  • Última actualización 2024-04-24 11:17:46
Después de superar toda clase de dificultades climáticas y topográficas, se empieza a normalizar el suministro de agua potable y a superar totalmente la emergencia que se vivía en la ciudad de Villavicencio, Meta.
Meta

Vuelve la normalidad en el suministro de agua potable a Villavicencio, Meta

Después de superar toda clase de dificultades climáticas y topográficas, a esta hora avanza el llenado y presurización de las líneas de distribución del acueducto de Villavicencio, con lo cual se empieza a normalizar el suministro de agua potable y a superar totalmente la emergencia que se vivía en la ciudad.

En la madrugada de hoy (martes) el personal de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado (EAAV) terminó los trabajos de reparación de la línea de aducción que viene de la bocatoma de la quebrada La Honda hacia la planta de tratamiento de La Esmeralda, que incluyeron primero la reparación de un tramo que se derrumbó hace 15 días en el sitio conocido como ‘Ricardo Hernández’, y además, la reparación de una fuga detectada en la tubería en un paso subfluvial por el río Guatiquía, en el sitio conocido como ‘El Acuario’.

El gerente de la EAAV, Jacobo Matus, confirmó que a las 4:00 de la mañana de hoy (martes) comenzó el envío gradual de agua desde la bocatoma hacia la planta de tratamiento, para efectuar las pruebas hidráulicas de rigor e ir paulatinamente haciendo el llenado y presurización. De esta manera, en el transcurso de hoy (martes) y mañana se normalizará el suministro de agua a todos los villavicenses en condiciones de presión y continuidad.

“Gradualmente hemos ido aumentando los litros a enviar desde la bocatoma, desde 200, luego 600, 1.300 y así hasta llegar a los 1.600 litros por segundo en las próximas horas, que es la capacidad de la planta de La Esmeralda. Este protocolo es necesario para evitar que por las altas presiones se pueda dañar la tubería en algún tramo, verificar que las reparaciones hayan quedado bien, que en sectores como ‘La Ye’, a la altura de Puente Abadía, no se presenten fugas y monitorear el comportamiento en general de la línea de aducción en todo su recorrido, ya que estuvo desocupada por espacio de 14 días, lo cual hasta ahora se ha desarrollado con normalidad”, explicó Matus Díaz.

Igualmente, expresó su gratitud y admiración al personal técnico y al grupo de operarios de la EAAV que realizaron los trabajos. “Desafiaron las condiciones más difíciles e inimaginables para la comunidad, aun arriesgando sus propias vidas, y pusieron todo su empeño para lograr reparar los dos daños de la tubería en el menor tiempo posible”, sostuvo el funcionario.

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